Mukuyé es comprometida en matrimonio por su padre con el joven que viene de la gran ciudad, hijo del socio con quien hará grandes negocios en esta tierra que se están repartiendo, por su bien desde luego, y de paso incrementarán su fortuna personal.
Hay una gran sacudida, tanto en esta tierra debido a la fuerza de la naturaleza, como en el corazón de Mukuyé, que son lo mismo, y ella muere provocando la desesperación de su padre y su tardía comprensión de lo que ha hecho.
Esa misma magia hace el milagro y Mukuyé se recupera para el final feliz. En esta historia.
Cabe destacar la interpretación de "Sueñame Quintana Roo", bellísima pieza. Quien no fué a la función se la perdió.
Un buen trabajo de dirección musical, hermosas voces, un buen bailarín, el pianista. En general una producción valiosa y muy bien hecha, con las deficiencias de un trabajo que no tiene aún el antecedente que lo respaldaría, un proceso que ha faltado en nuestra corta historia cultural. Quintana Roo es Mukuyé, que apenas está dejando la infancia.