tu imagen no se borra.
Tu propio viento a veces,
riza el agua
y son también hojas tuyas
las que caen…
Sergio Hernández
Jaime
se extiende por espacios, merodea ambientes y recrea personajes que duermen en
el sepia daguerrotipo de la cotidianeidad, sin embargo, al volverse parte del
trazo de Villegas, se apartan de la monotonía citadina para irrumpir de manera
audaz en un contexto visual donde el pintor es la deidad que sintetiza el mundo
de las ideas con el devenir del mundo.
Villegas
en su obra a diferencia de otros artistas plásticos, no busca alegorías
surrealistas o la intermitente fantasía; al contrario, éste se sirve de la
observación diaria para representar la metamorfosis de una naciente ciudad. En
las cincuenta imágenes que conforman esta exposición, el espectador puede
encontrarse a sí mismo, y decir para sus adentros: soy un rasgo, una silueta, una
línea inconclusa que se impregna a una hoja sin saber cuando cometió el arrojo
o el pecado de volverse parte del juego pletórico de Jaime, donde ganar
significa permanencia.
El
trabajo de Villegas no sólo registra a una sociedad en movimiento, sino concilia
a diversos sectores de nuestra población; de manera diáfana, honesta y
silenciosa. En este recorrido se puede apreciar una noche de sugestivo jazz, un
concierto popular en el Parque de Las Palapas; una representación teatral; la
alternatividad de los tambores, el fuego y la artesanía; una transmisión de
radio o alguna tertulia literaria; todo es tan disímil en apariencia, pero al
unificar su esencia se conforma un todo: Cancún. Al mismo tiempo, este cronista
gráfico, revela su secreto, no es sólo el que observa, también se vuelve un
símbolo dentro de su obra; por eso en algunos trabajos vemos o descubrimos un
bosquejo de él; no con afán protagónico sino como un elemento más para
representar de manera fidedigna los entornos.
Al
mirar el trabajo de Villegas, hace que recuerde una frase de Marc Chagall, que
bien puede aplicarse al estilo de este artista cancunense: “Todo nuestro
mundo interior es real; quizás más real que el mundo visible. Cuando se llama
fantasía o cuento a todo aquello que nos parece ilógico, sólo se demuestra que
no se ha entendido a la naturaleza.”
GABRIEL AVILES. presagiomarino@hotmail.com
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